
Anti-poeta mexicana
"Me escribo como un número imaginario tatuado en dedos ajenos, llena de bolitas de orbe color vino que conectan con mi torrente sanguíneo para rebotar en el psique."
Mayo 1995.
Concebida en la ciudad del ruido eterno, de padres chilangos, raíces multicolores pero sobre todo niña problema, me descubrí como una adolescente terrostánica con una necesidad enorme de aprender a escribir, sonorizar e interpretar mediante el cuerpo todo aquello que desde a temprana edad me inundaba los sentidos y el corazón, bff de los excesos ocasionales, temperamento explosivo por traer a mis ancestros encimados en el lado derecho, de educación básica promedio pero autodidacta por convicción, ideales claros y mayormente contestatarios definen el vórtice cultural que mascaría en los años venideros, sin presunciones de querer formar parte de la nueva generación de la poesía joven, dejo aquí una ventana abierta a lo que soy, pero sobre todo a lo que realmente siento.